El poder del ON.
On, significa un peso, una deuda que se contrae, una carga que cada persona lleva lo mejor que puede. Un On, es una deuda que debe ser pagada.
Mucho se habla de la “pasividad” de los japoneses que se puede observar más claramente cuando ocurre un percance o cuando una persona se encuentra en apuros. Se ha catalogado a esa “pasividad” como falta de iniciativa, falta de cortesía y hasta frialdad. Muchas veces lo escuché y una que otra vez me tocó observarlo; leyendo e investigando uno aprende; se aprende que existen muchas formas de pensar, de interactuar y de actuar.
Esa “pasividad” está íntimamente relacionada con esa deuda que tiene que ser pagada: el On. La intervención en determinados sucesos al cual uno “no ha sido llamado”, haría que el receptor llevara un On.
Un On puede llevarse de manera constante y con la posibilidad de que se pueda interpretar de maneras distintas por las demás personas. En el “circulo” del On siempre existe la coexistencia de dos estados de ánimo totalmente opuestos. El estado de ánimo de la persona que da y el estado de animo de la persona que recibe; de allí que cada persona inmersa o del entorno lo interprete de manera distinta.
Aunque los tiempos han cambiado y podríamos decir, en cierto modo, que Japón se ha occidentalizado; la verdad y la realidad es que la mayoria de las relaciones de Japón se basan en “esa deuda” y eso en mayor o menor medida estimula a las personas a ofrecerse enteramente a sí mismas en compensación por los bienes recibidos.
De allí la frase:
“Nunca se devuelve ni la diezmilésima parte de un On“
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Anónimo
Wooow me parece muy interesante porque muchas veces pensamos cosas herradas de ciertas culturas sin darnos a la tarea del porqué actúan o toman esos comportamientos, ahora todo tiene sentido!!!. En esta parte considero que las deudas son deudas de Honor y el japones es un ser honorable.